|
|
 |
|
Capitulo V |
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Capitulo 5:
Edward sacó sus labios de los mios con una velocidad increíble después de unos dos segundos. Sus ojos se transformaron en algo peor que la rabia y el dolor, pero había algo en su mirada que mostraba mucho mas que dolor, algo bueno, no malo como creía.
Caminó un poco mas hacia adelante a donde yo estaba.
Yo retrocedí. Los ojos de Edward ya me estaban poniendo nerviosa.
De pronto, Edward se abalanzó sobre mi con los ojos de un color muy extraño y con un fervor nunca antes visto.
De nuevo retrocedí algunos pasos, mientras que Edward susurraba algunas cosas por lo bajo.
De momento, Edward saltó con una agilidad increíble sobre mi.
Dí un fuerte grito, dando más pasos hacia atrás. No me había dado cuenta de que el tejado, donde estaba parada, había terminado su longitud, por lo que estaba en la orilla. Caí del tejado, mientras veía como Edward me miraba desde el tejado con una ambición terrorífica, que hacia, mientras que caía, que mi piel se pusiera como piel de gallina.
No había pensado hasta entonces, de que mi suerte este último tiempo no había sido la mejor. De hecho, ahora que lo pensaba, la pérdida de memoria, las grandes peleas con Jacob y algunas noticias extrañas en mi vida, con seres que no son lo que aparentan, me hacían pensar que todo esto era un sueño. Solo un sueño.
La ilusión del sueño rompió cuando me ví a sólo unos dos metros del suelo. Cerré los ojos con fuerza, pero no había ya mas viento que atravesara mi rostro cuando caía, sino que quieta en un lugar muy cómoda.
Abrí los ojos con alguna precaución, pero vi algo que jamás me había imaginado, era Jacob, con los pendientes y fijos en mi.
-¡¿Qué te pasó?! -me dijo dejándome en el suelo-. ¿Estás bien? ¡¿De donde vienes?! ¡Mírate, estás blanca!
La respiración se había hecho casi insostenible por lo que cerré los ojos y descansé un poco de lo que había pasado.
***
-Jacob… la verdad es que no creo que me vuelvas a gustar nunca más -le susurré mientras que él recién analizaba la noticia de mi beso con Edward.
Se paró rápidamente de su asiento, con los ojos fijos en mí como si quisiera comerme de momento.
-¿Sabes lo que pienso de eso? ¡Púdrete con tu amor a Edward! ¡De todos modos él no te besará ni te amará, sólo te comerá y te matará!
Quedé paralizada con las palabras de Jacob, pero lo que me dio mas pena es que lo dijo con un gran sentimiento de odio y repulsión en su cara.
No creía que Jacob me hubiera gritado de esa forma, me paré de forma automática haciendo como si no hubiera escuchado nada.
Las ultimas palabras de Jacob me quedaron retumbando en la cabeza.
Jacob tomó la manilla de la puerta principal de mi casa, fui corriendo hacia él con los ojos fijos en él, sacando toda la ira que tenía adentro de mí.
-¿Qué acabas de decir? -le dije a Jacob con voz dura-. Tú ni siquiera sabes lo que va a hacer Edward, no eres nadie para hablar de ese tema. ¡Sal de mi casa!
-¡¡¿Qué crees que hago?!!! -gritó tomando la manilla de mi casa.
Abrió la puerta y salió de mi casa, lleno de odio en sus facciones, movimientos y en todo lo que se pueda ver.
***
No tenía pena de todo lo que había pasado, de hecho creo que me sentía mucho más tranquila que otras veces. Estaba en paz, pensando en como sería mi nueva vida con Edward. Las ventajas que tendría sin que Jacob me molestase al respecto, que siempre estaba cerca de mí como un guardaespaldas. Pero ya no.
Mis padres no estaban, se habían ido a donde mi hermana, que al parecer había tenido otra crisis nerviosa con su novio, que siempre le hacia pasar malos ratos.
Eran las dos de la tarde, un día domingo, por lo que estaba en pijama en la cocina preparándome mi comida.
Tenía una mínima esperanza de que Edward viniera a mi casa para hablar, como lo habíamos hechos antes. Estaba esperando su visita.
De momento, golpearon la puerta de una forma inigualable. Era como con dureza y mucha rabia. Supuse que era Jacob por la manera de cómo había salido y por la forma en como estaba.
Me paré en frente de la puerta, respiré hondo y abrí la puerta, teniendo unas cuantas palabras en mi boca que le quería decir hace rato.
-¡Vete! -le grité antes de mirarlo, pero al ver de quien verdad se trataba, la cara se me puso roja.
-Vaya manera de recibir a la gente, me imagino si tendrás muchas visitas al día.
-Oh, Edward. Lo siento, es que pensé que era Jacob… pero, pasa si quieres. Por favor.
Edward sonrió con su sonrisa que iluminaba a más de in kilómetro de distancia.
Entró en mi casa, caminó hasta el centro del living, donde empezaba el comedor, se dio vuelta y me miró con sus ojos que siempre derriten a cualquiera.
-Parece que te molesté justo cuando estabas comiendo -dijo con una pequeña sonrisa en la boca.
-No, no es nada. Toma asiento, voy a apagar la olla para que la comida no se rebalse.
Fui corriendo hacia la cocina, apagué la olla y enseguida fui a mi habitación para ponerme un poco mas presentable para estar con Edward. No podía estar con pijama con visita, y menos con una visita como él.
Estuve menos de dos minutos mirándome al espejo, viendo como mi rostro quedaba con la pintura.
De pronto escuche alguien detrás mío. Me dí vuelta velozmente, viendo a Edward al otro lado, con los ojos serios y sin ninguna expresión que demostrara amor o cariño, solo seriedad.
-No hay necesidad de arreglarse, sólo quiero hablar contigo de lo que pasó. Y aclarar algunos términos.
Me senté en mi cama, viendo la seriedad en que me hablaba, era como si no quisiera estar aquí haciendo esto. Parecía que le costaba bastante.
-No creas que… por que nos besamos, voy a estar contigo. No quiero… herirte ni nada por el estilo, pero lo que pasa es que… nosotros no podemos estar juntos.
-Es por Bella, ¿cierto? No me creas pesada ni nada de eso, pero es simplemente dejarla y ya esta…
Las expresiones de Edward fueron cambiando cada vez más, dando un actitud bastante atemorizante.
-¡¿Dejar a Bella?! Yo no pienso dejar a Bella, ese no es el punto. EL punto es que no te puedo gustar, porque yo amo a Bella mas que a nada.
Me paré y me fui directamente hacia él, que parecía enojadísimo conmigo.
-¿Cuál es el problema? ¿Hay algo que no te pueda gustar de mi? Dímelo, te prometo que lo entenderé.
-No es eso. Lo que pasa, es que… yo sólo puedo amar a una persona y esa única persona es Bella -se acercó mas a mi de lo que estaba y me puso ambas manos en mis brazos-. Te puedo hacer daño, mucho daño. Por favor no te acerques a mi. No me hables y no me llames. No quiero saber más de ti.
Me soltó de momento y se fue hacia el segundo piso. Fui corriendo hacia donde se encontraba Edward, preguntándome en lo que me habrá querido decir.
-¡Edward! -le grité, sin saber en donde se encontraba.
-¿Qué?
Me di vuelta de forma sorprendida. Lo miré a los ojos de la forma mas seria que podía imaginarme.
-Dime lo que eres. Debo por lo menos saber o tener una idea.
-Soy un vampiro. Hablamos mañana, veo que no tienes la disposición para escuchar.
|
|
|
|
|
|
|
 |
|
Advertencia :) |
|
|
|
|
|
|
ADVERTENCIA:
cualquier hisotria publicada
aqui es escrita por mi y nadie mas
que yo.
NO COPIEN O SINO LA PAGINA
SERA CERRADA.
Gracias por su atencion y disfrute
:) |
|
|
|
Hoy habia 1 visitantes (57 clics a subpáginas) ¡Aqui en esta página! |